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Mis reflexiones filosóficas cinematográficas

Publicado: 2019-05-04

La Nana Mágica


Nanny McPhee llega a la desordenada casa de un padre que se ha quedado solo con sus 7 traviesos hijos. El viudo ha perdido el control sobre ellos, trae a una y otra nana, pero los pequeños son insoportables y las van espantando de una en una, hasta que la número diecisiete sale corriendo y no queda ninguna disponible. Desesperado, clama al cielo y sus súplicas son oídas, llega una Nana, pero no una cualquiera, como la situación lo amerita, llega una muy especial, una nana mágica.

Ante el pedido del padre de no tratarlos con excesiva dureza dado que han sufrido la pérdida de su madre, la nana le responde: “Me aseguraré de darles justo lo que necesitan, cuando no me quieran pero me necesiten, me quedaré y cuando me quieran, pero ya no me necesiten, me iré”, y lo primero que les enseña son la palabras mágicas, por favor y gracias, hacer lo que se les dice y aceptar las consecuencias de sus actos, y esas simples normas bien asimiladas logran la conversión que los niños necesitan, el hogar recobra la armonía y todos son felices.

La película nos muestra como a medida que los niños se van haciendo más conscientes, la niñera se va transformando físicamente, llega muy fea, con verrugas y dientes torcidos, pero en tanto va logrando que los niños aprendan, ella también se va embelleciendo; con el primer “Por favor” se le desaparece una verruga, con el “Gracias” pierde otra, y así con los dientes y el feo cabello. Como la filosofía nos enseña, el trabajo por lograr virtudes va de adentro hacia afuera y no es que con magia, de un día al otro alguien se vuelva bello, sino simplemente, que si por ejemplo, a una persona antes le encantaba discutir, con algo de esfuerzo por dominarse, aprenderá a callar, por lo tanto, a esa misma persona se le sentirá y se le verá más tranquila y la serenidad, también es un tipo de belleza.

Claramente Nanny McPhee no es un ser de este mundo, es una especie de ángel enviado por la madre de los niños, que aun muerta sigue velando por ellos. La nana atraviesa las paredes, las cosas suceden cuando golpea su bastón y vive en un cuarto vacío porque no tiene las necesidades materiales de los humanos.

Reflexión final

Si pudiéramos trasladar esta bella película a nuestra vida, por qué no pensar en que alguien que nos quiere y nos mira desde arriba, en el momento en que más lo necesitemos, nos pueda enviar a alguien, una especie de nana que en un primer momento parezca algo severa, pero que nos ayude a aprender la lección que necesitamos para ser mejores. ¡Estemos atentos y demos la bienvenida a nuestra Nanny McPhee!


Escrito por

Ana Ayquipa Cabrera

Comunicadora, bloguera de cultura


Publicado en

Cine Filosófico

Cine filosófico. Análisis de películas con trasfondo filosófico. El cine trae muchos mensajes y es una herramienta para la mejora personal.